Hace unas semanas mis compañeras de Danza Arabe comentaban con entusiasmo que estaban leyendo un Best Seller mundial titulado las 50 Sombras de Grey, y que estaba muy interesante porque un hombre iniciaba a una mujer en nuevas prácticas sexuales, algo así como sadomasoquismo para chicas postmodernas.

Decidí comenzar a leer para aderezar nuestras tertulias antes de las clases. Fue así que descurbri una historia que en principio me pareció que contenía demasiada ingenuidad por tratarse de un rico magnate y una joven virgen clase media, lo que me hizo recordar nuestras típicas telenovelas latinoamericanas en las que un hombre rico, poderoso y atractivo seduce a una chica pobre o clase media, que se deslumbra ante el lujo, el dinero, el poder y la belleza. Así mismo, recordé los cuentos de hadas que alimentan la pasividad y dependencia de las niñas mostrándoles que deben esperar el beso del príncipe azul que las despierte del letargo.

La novedad es que este príncipe tiene traumas en la infancia que por lo que se muestra en el primer libro de la trilogía es el origen de sus preferencias sádicas en las relaciones sexuales, lo cual para una virgen inocente y osada despierta curiosidad por lo oscuro y lo sexual. Además, Anastasia se toma la relación que comienza con Cristhian Grey como una investigación profesional, empeñada en descubrir por qué le gusta controlarla, por qué prefiere castigar para su satisfacción sexual, por qué no le agradan las caricias rechazando el contacto afectivo.

Anastasia se empeña en negociar un contrato en el que su única exigencia es afecto y amor, mientras él pone una serie de reglas de obediencia, castigo y detalles de las practicas sexuales tipo juego de roles que el desea experimentar con ella.

A todo esto se añade que esta joven protagonista cree que puede cambiar y transformar a este hombre desnudando ese pasado doloroso anterior a los 4 años, cuando fue adoptado por una familia de dinero. Esa fantasía de cambiarlo se vuelve realidad, lo cual es otro ingrediente bastante fantasioso y frecuente en las relaciones de pareja, muchas personas crecen y evolucionan pero por decisión personal, no porque su novia lo saque de la oscuridad a la luz y la virtud.

En resumen, esta trilogía engancha por la curiosidad ante nuevas prácticas sexuales que abren el abanico de posibilidades a muchas mujeres convencionales, por las fantasías del principe azul que seduce a la chica virgen e inocente tipica de cuentos de hadas, de telenovelas y de la vida misma, así como la fantasía de transformar al hombre herido emocionalmente y oscuro para hacerlo un hombre afectuoso y amoroso. Desde mi perspectiva estas fantasías son muy tóxicas para nuestras mujeres que esperan sentadas a su principe malvado que ellas transformaran casi que con un hechizo. Al menos nuestras chicas convencionales activaron su deseo sexual, descubrieron algunas fantasías sexuales y prácticas mas arriesgadas e interesantes.

Les dejo un enlace sobre algunos datos interesantes de la trilogía, la autora y sus records de venta http://noticias.terra.com.co/50-cosas-que-quiere-saber-sobre-cincuenta-sombras-de-gray,6a981693cc279310VgnVCM4000009bcceb0aRCRD.html

Mas adelante dedicaré un post para el segundo y tercer libro de la trilogía.